El Gobierno remite a Cortes la reforma de la Ley de Navegación Marítima

El Consejo de Ministros del pasado viernes, 22 de noviembre, aprobó remitir a las cortes Generales el proyecto de Proyecto de Ley de Navegación Marítima, que actualiza el régimen general que rige el tráfico marítimo y adapta la normativa nacional a los convenios internacionales suscritos por España.

Con esta norma se pretende cumplir un triple objetivo. Por un lado, el Gobierno quiere alinear el ordenamiento jurídico en materia de navegación marítima con los términos del Derecho Marítimo Internacional. De igual modo, con los cambios que se proponen también se busca dar mayor seguridad jurídica en el tráfico marítimo, como consecuencia de la mayor coordinación que se propone entre las normas españolas, europeas y los convenios internacionales vigentes, tanto de Derecho Público como Privado. Finalmente, las autoridades buscan adaptar la normativa a la realidad actual del transporte marítimo.

Más concretamente, el nuevo texto legal configura todo un estatuto jurídico del buque y de su régimen registral, e, igualmente, regula el contrato de construcción naval con innovaciones en el contrato de compraventa de buques.

El proyecto modifica la responsabilidad de armadores y navieros, como sujetos de la navegación y regula los contratos de utilización del buque: de arrendamiento, de fletamento, de pasaje, en el que se presta especial atención a los derechos de los pasajeros, de remolque y, como novedad por la importancia de la navegación de recreo, el contrato de arrendamiento náutico, así como los contratos auxiliares de la navegación, entre los que se introduce el de gestión naval y se da una nueva regulación del fletamento.

Finalmente, la normativa remite a los convenios internacionales que regulan los accidentes en la mar en los casos de abordaje, avería grave, salvamento, bienes naufragados o hundidos y responsabilidad civil por contaminación, y, al tiempo, se moderniza la regulación del contrato de seguro marítimo y sus especialidades procesales, como el embargo preventivo de buques o la venta forzosa de los mismos.